Este proyecto propone la creación de un extenso mural con el objetivo de fortalecer la identidad visual de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP, reflejando sus conquistas, su historia y sus luchas.

Según el equipo de trabajo convocado para este proyecto, un mural implica un proceso comunitario de creación identitaria, apropiación y empoderamiento. Sus imágenes permiten relatar, interpelar, modificar el entorno, creando un nuevo espacio en el muro y en el contexto, transformando la cotidianeidad de quienes lo transitan y lo habitan, inaugurando una nueva perspectiva sobre el lugar y en este caso sobre una institución transitada y habitada por miles de sujetxs activos y actuantes sobre la sociedad, como lo es la Facultad de Ciencias Exactas.

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  Ante la convocatoria para realizar un mural identitario en esta institución, se propone llevar a cabo un mural con la técnica de mosaico, atendiendo a su durabilidad en el tiempo y a la necesidad de poco mantenimiento a largo plazo. Pero también, considerando que esta técnica posibilita la creación colectiva con la comunidad (estudiantes, docentes, no docentes, autoridades y demás miembros de la institución), permitiendo su participación en talleres de mosaiquismo. Un espacio de trabajo colectivo en el que la comunidad educativa y lxs muralistas pueden compartir, aprender y construir las imágenes a instalar en el muro. En este sentido, el proceso de realización del mural se plantea a partir de la metodología de producción acción-participativa, la cual posibilita trabajar conjuntamente y de manera activa con la comunidad en todas las etapas.

 

  En una primera instancia, se planifica la concreción de una actividad con la comunidad de la FCsE, con el objetivo de llegar a reflexiones que permitan evidenciar la riqueza de la institución y los proyectos que desarrollan, desde las carreras que se enseñan, los departamentos que la componen, la labor docente -destacando su capacidad como formadora de recursos humanos-, los proyectos de extensión universitaria que involucran a la comunidad de La Plata y alrededores -con el compromiso social y político inherente a la práctica en territorio que representan-, la investigación, las luchas que se han llevado adelante y se siguen desarrollando en materia de DDHH, memoria y género; con el objetivo subsiguiente de dar imagen a aquellos discursos que lxs participantes consideren representativos, necesarios y pertinentes a representar en el mural.

 

  Posteriormente, se desarrollará una etapa de investigación por parte del equipo de muralistas partiendo de estas ideas y reflexiones, así como una búsqueda de archivo que aporte a conocer más sobre la historia de la institución, su carácter identitario presente; que permita enriquecer el repositorio de imágenes y relatos visuales para el mural. De este modo, se propone un proceso de creación del diseño de manera crítica, dialógica y consensuada en los talleres participativos, en torno a lo que se desea proyectar colectivamente, a fin de lograr la visibilización de todos los temas que hacen a la identidad e historia de la FCsE, de sus actividades y su valorización hacia la comunidad interna y la ciudadanía que atraviesa los espacios públicos adyacentes al predio de la Facultad. Este proceso, sumado a la posterior creación colectiva de las piezas de mosaico en talleres, buscará también, generar la apropiación de la obra por parte de lxs miembrxs de la facultad.

 

  Crear identidad desde las herramientas que genera el arte público, en este caso, en un muro muy transitado de una universidad pública, propone una política cultural donde la identidad de una institución será generada, no desde una imagen impuesta por lxs artistas, sino propuesta y creada con la comunidad, fortaleciendo lazos, generando empoderamiento y apropiación, reflejando la riqueza de las propuestas que desarrolla continuamente la Facultad de Ciencias Exactas, su historia, así como sus aportes a la sociedad y el compromiso con las luchas por los Derechos Humanos y de género.

 

  Este proyecto propone abocarse, entonces, al muralismo tal como lo concibe María Cristina Terzaghi, como un “hecho social, ya que propone incorporar el arte como constitutivo del espacio urbano, integrado en un proyecto de arte para todxs” en donde “la cultura no se construye para el otrx, sino con el otrx”. En este sentido, consideramos el mural como un dispositivo de permanencia en el tiempo, por lo cual debe hablar y defenderse solo, mantener la voz de quienes participan en su realización y conservar una historia que deje huella en la sociedad que lo habita. En cuanto a su dialéctica con el entorno, el proyecto aspira a generar una experiencia artística-pedagógica para que deje un legado y una historia en un proceso de construcción colectiva que involucra a las comunidades (interna y externa a la FCsE) en su elaboración e interpretación: un dispositivo que buscará interpelar a los espectadores -transeúntes a una reflexión y un análisis desde la creación de la imagen hasta su concreción, que les permite situarse en tiempo y espacio, posicionándose políticamente frente al ideario planteado por la FCsE.

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